Estos son los beneficios de tener un perro en casa

Cancún, Quintana Roo.- Un perro es el mejor amigo del hombre, lo sabemos, pero además de su compañía fiel y desinteresada, aporta múltiples beneficios para la salud humana, incluyendo la salud física y mental.

El National Institutes of Health (NIH) de Estados Unidos demostró que convivir con un perro o con varios ayuda a reducir el estrés y a disminuir la presión arterial, informó Forbes.

Además, los investigadores determinaron que los caninos ayudan a combatir la soledad y mejorar el estado de ánimo.

Un perro mejora tu salud ¿Como lo hace?

Para empezar ayudan a evitar el sentimiento de soledad. Tener un perro aporta protección y seguridad.

Es una maravillosa manera de empatizar o hacer «clic» con la gente que nos topamos en la calle y que también los ama.

Basta con acudir al parque de perros e intercambiar sonrisas con los dueños. Infalible.

Un perro también fomenta la responsabilidad, pues es un compromiso que abarca más de una década y requiere atención, alimento, baños, paseos. Esto ayudará a los dueños a establecer rutinas que mejorarán su estado de ánimo con el tiempo.

Son un apoyo para superar la depresión. Una persona con esta enfermedad tiene un sentimiento de vacío y de tristeza; incluso puede dejar de valerse por sí misma en las actividades cotidianas; sin embargo, un perro es una buena motivación para salir de la cama y preocuparse por alguien más.

Sacarlos a pasear los obligará a tener contacto con el mundo exterior, e incluso puede ser un confidente, pues escuchará todo lo que tengamos que decirle sin juzgarnos.

También son una excelente compañía para los adultos mayores, a quienes, además de aportarles compañía, los ayuda a mantenerse activos, principalmente a aquellos que viven solos.

Un can fomentará la socialización y les dará un propósito en su día a día. Para ellos se recomiendan cachorros o animales activos, que los impulsen a movilizarse en la jornada.

Finalmente, un perro te hará feliz. Los investigadores han determinado que ellos estimulan la producción de xitocina, serotonina y dopamina, conocidas como las hormonas de la felicidad, y reducen los niveles decortisol u hormona del estrés.

En resumen, una colita cimbreante, una nariz húmeda y patitas con olor a queso son la mejor compañía.

Basta con recordar la historia del náufrago australiano que sobrevivió meses en el mar gracias a la compañía de una perrita.