Acusan ecologistas tala de 10 millones de árboles por Tren Maya
Cancún, Q. Roo.- Ambientalistas denunciaron “ecocidio” en la selva húmeda quintanarroense, donde las obras del Tren Maya habrían derribado alrededor de 10 millones de árboles.
Roberto Rojo, integrante de la organización “Sélvame del Tren en Quintana Roo”, expuso que la maquinaria ha dejado un sendero de destrucción en la exuberante selva maya, según López Dóriga Digital.
“Lo que es más preocupante es la inminente contaminación del sistema de cuevas y ríos subterráneos más grande del mundo”, insistió.
El biólogo y espeleólogo afirmó que desde que supieron el cambio en el trazo del Tramo 5 Norte del Tren Maya, que va de Cancún a Playa del Carmen, procuraron evitarlo, pero no les prestaron atención.
Originalmente, las vías férreas en Quintana Roo iban a desarrollarse de manera paralela a la carretera; pero luego se movieron hacia la selva, por encima de cuevas y ríos subterráneos.
Desde agosto del 2022 los ciudadanos levantaron la voz y expusieron en Twitter las denuncias.
#SedenaLeaks 🔓 revela que hasta agosto de 2022 se habían talado 500 mil m2 de selva entre Tulum y Cancún para el Tren Maya, superficie equivalente a 11 veces el Zócalo. Aquí un hilo 🧵 pic.twitter.com/tZaByV4JK6
— Mexicanos Contra la Corrupción (@MXvsCORRUPCION) October 11, 2022
“Nos manifestamos e hicimos un SOS muy grande para decirle al presidente y al gobierno ‘esperen, no puede ser, no podemos destruir lo poco de selva que nos queda’, pero no nos escucharon”.
El cambio de trazo se debió a la premura del proyecto, que el presidente insistió en inaugurar el próximo diciembre, señaló Aracely Domínguez, presidenta del Grupo Ecologista del Mayab (Gema).
Como los tramos que corren por Quintana Roo aún no están terminados, éstos se pondrán en marcha hasta febrero.
Por la falta de planeación y conocimiento de la zona, los encargados introdujeron 17 mil pilotes de 1.2 metros de diámetro a 25 metros de profundidad, para sostener las obras del tren.
“Va a tener efectos a corto, mediano y largo plazo que no fueron evaluados, que no fueron mitigados y que podrían haberse mitigado de muchas maneras si se hubieran hecho los estudios necesarios para determinar cuál era la ruta adecuada, por dónde sí, por dónde no”, remarcó.
Violaciones a la ley por el Tren Maya
En agosto del 2022 se habían talado 500 mil m2 de selva entre Tulum y Cancún, superficie que equivale a 11 veces el Zócalo de la Ciudad de México.
Para agosto del 2023 la superficie dañada se había incrementado a 6 mil 659 hectáreas, según Mongabay.
Además, un análisis de imágenes satelitales realizado por la organización no gubernamental CartoCrítica mostró que se ha deforestado el 61 por ciento de las 10 mil 831 hectáreas que actualmente están ocupadas por obras relacionadas con el Tren Maya.
Asimismo, el desmonte del 87 por ciento de las tierras se hizo sin contar con una autorización de cambio de uso de suelo forestal, como marca la ley ambiental.
Viridiana Maldonado, abogada del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), dijo que para que una persona, empresa o institución de Gobierno federal, estatal o municipal pueda desmontar o talar un terreno, la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable establece que es necesario presentar una solicitud de autorización de Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales (CUSTF) ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Ésta sólo se autoriza en casos excepcionales, cuando el cambio de uso de suelo no compromete la biodiversidad ni provoca la erosión del suelo, el deterioro en la calidad del agua o la capacidad de almacenamiento de carbono de los ecosistemas.
En el caso de las 18 autorizaciones de CUSTF relacionadas con el Tren Maya, 16 fueron autorizadas durante 2023, es decir, cuando ya habían comenzado los trabajos y los terrenos ya habían sido desmontados.