Piden a turistas no cancelar reservaciones a causa del ciclón

Cancún, Q. Roo.- Visitantes extranjeros no deben cancelar sus reservaciones hoteleras y paquetes turísticos en Quintana Roo, a causa del fenómeno meteorológico, pidió el secretario de turismo federal, Miguel Torruco Marqués.

Aseguró que iba a entablar contacto con los turistas que permanecen en el destino, para brindarles ayuda, como ocurrió con los varados durante el huracán Otis, en Acapulco. Añadió que sólo espera el recuento de daños oficial, para actuar en consecuencia. Aunque en un panorama diferente, a Cancún el meteoro no lo tomó por sorpresa, según Miilenio.

Ante la amenaza del huracán Beryl, muchos turistas escaparon hacia lugares alejados de la tormenta u optaron por retornar a sus lugares de origen desde un par de días antes que golpeara el meteoro, según Reforma.

Sin embargo, otros tantos quedaron atrapados, pues desde el jueves 5 de julio se canceló el total de operaciones del Aeropuerto Internacional de Cancún.

Muchos viajeros nunca habían experimentado un ciclón y temían una catástrofe, pues el meteoro arrasó con su categoría 5 varias ínsulas de las Antillas Menores. Unos más, aunque sí tienen experiencia con huracanes, dijeron que preferían pasarlos en sus propias casas.

Turistas presumen en redes haber sobrevivido a Beryl

Por otra parte, algunos visitantes comenzaron a salir a las calles luego del paso del huracán Beryl y a tomarse fotos y pasear, como si no hubiera pasado nada.

Documentaron negocios tapiados y restaurantes cerrados, pero al mismo tiempo “presumieron” en sus redes sociales que lograron sobrevivir al huracán y ahora tienen una nueva experiencia, según N+.

Otros incluso salieron a la orilla del mar desde antes del impacto, para documentar cómo se veía la costa unas horas antes del impacto del meteoro.

Algunos usuarios criticaron esta actitud de los visitantes, quienes “romantizaron” un fenómeno meteorológico que pudo tener consecuencias lamentables.

Aludieron que no son conscientes que mucha gente no tiene los “lujos” de un refugio hotelero, y que tuvo que pasar la noche con la incertidumbre de si iba a encontrar su vivienda de pie al día siguiente.