Mujer rompe estereotipos para sacar adelante a su hijo con cáncer
José María Morelos, Q. Roo.- En medio de los escombros y el polvo de la construcción, María Selene Briseño Cham se erige no solo como una ayudante de albañilería, sino como un símbolo de tenacidad y amor inquebrantable por su hijo.
Desde hace varios años, esta madre soltera ha cargado no solo con bloques y cemento, sino con la esperanza de ver a su pequeño de seis años vencer a la leucemia.
Lo que sorprende a muchos no es solo verla en una profesión tradicionalmente dominada por hombres, sino la energía y dedicación que María Selene demuestra cada día en la obra.
«La necesidad de cubrir los gastos médicos de mi hijo me llevó a buscar este empleo», comenta, con una mirada que mezcla determinación y orgullo.
Por amor a su hijo
Sus manos, endurecidas por el trabajo, realizan con destreza todas las tareas que le piden, demostrando que la fuerza no solo reside en los músculos, sino también en el corazón.
Su pequeño, que requiere de 146 quimioterapias para vencer su enfermedad, ha recibido hasta ahora 60 tratamientos.
A pesar del camino largo y desafiante que aún queda por recorrer, María Selene no se rinde.
«Hay que salir adelante como sea, para poder mantener a la familia,» afirma con firmeza.
Pero María no está sola en esta lucha. Cada vez más mujeres, inspiradas por su ejemplo, están rompiendo estereotipos y buscando oportunidades en la construcción, demostrando que el coraje y la capacidad no tienen género.
«No soy la única,» señala, orgullosa de ser parte de un cambio que va más allá de los muros y los techos que construye.