Tren Maya, un viaje para descubrir los tesoros culturales de México
Cancún, Q. Roo.- Las obras del Tren Maya han abonado mucho al descubrimiento de importantes piezas y lugares arqueológicos en el sureste de México, que de otra manera hubieran quedado enterradas por tiempo indefinido. Ahora es necesario invertir para avanzar en las investigaciones de estos descubrimientos y embellecer los vestigios que ya se tenían, pero habían estado en el olvido.
A lo largo del trazo del Tren Maya, que abarcan mil 500 kilómetros en cinco estados y 15 estaciones, se han realizado múltiples descubrimientos, entre ellos más de 1.4 millones de fragmentos de cerámica, más de 50 mil bienes muebles e inmuebles como palacios y estructuras e incluso una pirámide de 25 metros de alto en una acrópolis, de unos 80 metros de largo, según Xataka.
En un comunicado reciente, Diego Prieto Hernández, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) indicó que luego de culminar las labores de salvamento arqueológico en los siete tramos del tren, ahora se enfocarán en sitios arqueológicos puntuales para aprovechar los recursos disponibles de la mejor manera.
Entre sus prioridades está mejorar las zonas arqueológicas que coincidan con el trazado del ferrocarril, para que sea mucho más sencillo el paso a los turistas. En éstas actualmente están renovando senderos y señaléticas, y aún incluso se siguen encontrando nuevos descubrimientos.
Las piezas desenterradas se exhibirán tanto en museos tanto ya existentes como nuevos, como el de Historia de Yucatán, que se inaugurará próximamente.
Hallazgos en la ruta del Tren Maya continúan
Apenas este 20 de julio se realizó un hallazgo en la localidad de Nicolás Bravo, Quintana Roo, cerca de la zona arqueológica de Konhulich, se trata de un conjunto habitacional que habría sido construido y habitado entre el siglo III y el IX.
Los expertos no descartan seguir desenterrando nuevos tesoros en las zonas que aún se han trabajado. El hecho también ha desencadenado críticas, pues hay quienes afirman que durante las obras se ha destruido un número indeterminado de bienes nacionales.