Septiembre, mes del testamento: Esto debes saber para hacerlo
Cancún, Q. Roo.- Septiembre es el mes del testamento. Esta campaña está vigente desde el 2003 para promover entre la población esta práctica, que otorga protección al patrimonio familiar.
Este año, el Gobierno federal, las administraciones estatales, el Colegio Nacional del Notariado Mexicano y los Colegios y Consejos Estatales de Notarios nuevamente pusieron en marcha el programa, con lo que ofrecen descuentos de hasta el 50 por ciento en el trámite y asesorías personalizadas.
Si tienes dudas acerca de cómo empezar a planear tu testamento, te dejamos los puntos clave que debes conocer.
De entrada, debes escoger conscientemente a las personas que tendrán un rol importante en el manejo de tus bienes, para garantizar la tranquilidad de tu familia.
También deberás designar una albacea, es decir, alguien que se encargará de que tu última voluntad se respete y repartir los bienes conforme dicta el documento, o administrarlos mientras esto ocurre, señaló El Economista.
El heredero es la persona que recibe los bienes y responsabilidades del testador, por ejemplo, las deudas.
El legatario es la persona que recibe un bien específico. Un tutor es una persona encargada de cuidar a algún menor hasta que cumpla los 18 años; también puede ser responsable de una persona con discapacidad. El curador es quien se encarga de vigilar que el tutor cumpla con las obligaciones derivadas del menor.
¿Cómo puedes realizar un testamento?
Si deseas otorgar tu testamento, deberás acudir a la notaría pública de tu preferencia y llenar la solicitud de datos personales. No olvides tu identificación oficial.
Luego, te sentarás con el notario a definir cada una de estas figuras y cómo quieres que se repartan los bienes, no sólo los actuales, también pueden ser las propiedades y ahorros futuros.
Después de hecho el pago se firma el documento, que resguardará el notario. En ese momento podrás tener tranquilidad que tu herencia será bien repartida al momento de tu muerte.
El testamento no es definitivo, puede cambiarse en cualquier momento. El válido es el último que se realice.