La Cascarita: Inaceptable la conducta del árbitro de la Liga MX
Inaceptable lo ocurrido en la Jornada 13 de la Liga MX, en el partido del América contra León, en donde el silbante Fernando Hernández en una discusión con los jugadores del equipo de La Fiera por una determinación arbitral, le propinó un rodillazo al jugador Lucas Romero.
Es imprescindible que la Comisión Disciplinaria imponga una sanción ejemplar al silbante azteca, pues los árbitros son los encargados de mantener un orden dentro del terreno de juego y en las bancas, no hay excusa, el juez de juego debe ser sancionado si no con el fin de su carrera, si con algunos años.
En primera instancia cuando el jugador agredido fue entrevistado por los medios de comunicación comentó que el silbante le dijo que había sido un accidente, sin embargo, en los videos que circulan en redes sociales se aprecia a Fernando Hernández conocido como “El Curro” se muerde los labios y le encaja la rodilla al futbolista en las partes blandas.
Posteriormente y debido a la presión de los medios de comunicación y las redes sociales, el silbante ofreció una disculpa al jugador, a la afición y al público en general por su reacción y comentó que “nunca lo agrediría, así como a ningún otro jugador”.
Sentenció su comunicado de twitter de cinco líneas que consciente de lo ocurrido acataría cualquier sanción que la Comisión Disciplinaria tome en consecuencia.
Grave
No es cosa menor lo que el día sábado ocurrió, es simple de calificar, es una conducta inaceptable sobre todo cuando se está luchando para que el futbol mexicano en los estadios sea un evento familiar en el que se pretende dar un ejemplo a los niños que ven a los jugadores como ejemplo y el silbante como el encargado de llevar a buen puerto las acciones.
Pero, ¿que hubiera pasado si el jugador agrede al silbante? Recordemos que en el futbol de Argentina, el jugador Elvio Porcel de Peralta, fue suspendido de por vida por dar un puñetazo al silbante, otro caso fue el de Héctor Robles quien fue sancionado por la FIFA con un año de inhabilitación por agredir al colegiado y tuvo que pagar una multa de cinco mil dólares.
Pero como estamos en México, recordemos la última situación que ocurrió en 2017con Pablo Aguilar, quien en su momento por agredir al árbitro fue suspendido por 10 encuentros, y Enrique Triverio con ocho encuentros, sin embargo, este castigo insuficiente ocasionó una huelga de los silbantes quienes pidieron condiciones seguras para trabajar.
Por tal motivo se espera que Fernando Hernández sea sancionado con rigor y siente un precedente para futuras ocasiones y que esto no sea juzgado como algo menor, e incluso como de risa, sino todo lo contrario, la Comisión Disciplinaria hoy más que nunca, cuando se pretende una reestructuración del futbol mexicano debe poner el ejemplo.
Nos leemos el próximo lunes y no olviden echar… La Cascarita.
Por Armando Herrera